miércoles, 15 de diciembre de 2010

EVITANDO PROBLEMAS... CAPITULO 9

La mirada de Juana cayó como si un rayo,sobre su escote  la hizo sentir sucia por lo que instintivamente acarició el cabello de su esposo, como si con este gesto infantil tapara su desnudez.
En verdad su ropa era la propia de alguien de su edad y del lugar que venia...pero ese era el problema, lo que esta bien en un lugar puede resultar escandaloso en otro.
Y con paso acelerado,busco el refugio de su dormitorio......hay que tristeza la embargaba...¡ Nunca se había sentido tan fuera de lugar !...
Pero no se dejaría abatir por esa mujer, pensó ya habia contendido con Rebeca y siempre le había ganado la partida, solo era cuestión de jugar bien las piezas...Y....¡ Jaque Mate..!
Ya más relajada, tomó un baño y vistió lo que parecia el atuendo oficial del lugar , pantalones de jean,
Una remeja holgada que no fuera a revelar nada extraño y una zapatillas....Ahora si creyó que estaba bien...Se miró y no se reconoció ....pero así no tendría la mirada de su suegra sobre ella...
Ya ataviada con su ”uniforme” se presento en el comedor familiar donde Raúl era atendido por Juana..
Esta le extendia la mano para darle unos mates, como “al nene”, le gustaban..
.Amargos...¡Como ella!; pensó María...
_¿usted toma mate, preguntó Juana? –
_Sí, ¡pero con azúcar por favor...! agregó María...
_Ahí tiene otro mate si quiere con azúcar, este és amargo, por que el azúcar me “lava”el mate...o sino hagase té o café ...¡¡ Ahi tiene todo..!! _ agregó Juana...
¡ Qué diferencia con la crianza de María...! su abuelita jamás hubiera dejado que un invitado se sirviera solo, era algo impensado por ella pero acá todo era tan diferente...
Raúl se incorporó y tomando una vieja pava preguntó _¿mate cocido, café, o té; amor?_ Dime...
_Un té , amor_ contestó María, pero ya Juana le sacaba la pava a su adorado hijo y preparaba ella misma la infucción..¡.Se notaba que esa tarea no era propia de los hombres!...y con su actitud quedó mas que demostrado.
Allí las tareas de cada genero parecen no mezclarse, osea que el pedido de un té era poco menos que un pecado para Juana , quien acostumbraba a correr por su esposo y sus hijos...
En apenas unos segundos coloco dulce, manteca, queso ;echo por las mismas manos de Juana y una galleta de campo sobre un mantel bordado seguramente obra de sus manos...
_Amor, ¡esta galleta esta dura! ....¿me pasas otro pan?_ dijo María.
Las risas no se hicieron esperar, ¿pero que fué lo que habia dicho?, Raúl le explicó a su mujer que ahora ella ya no estaba en la cuidad, y no podia pretender comer pan blando, es más, la razón es que solo una vez cada tanto se va al pueblo y se compra suficiente pan o comestibles para que estos alcancen a cubrir la necesidad...Osea que quizas esa galleta podia tener más o menos un mes o dos de elaborada...
Ya siendo mediodia,los hombres fueron llegando de sus rondas por los lotes, intercambiaban datos de los animales que debian ser vacunados , vendidos o de unas vacas que pronto iban a parir.
Demás esta decir que Juana preparaba dos platos, uno era “recalentado” es decir una vieja costumbre de quienes han pasado por necesidad alguna vez, es no tirar comida se vuelve a calentar y se sirve como primer plato, aunque esta no tenga nada en común con el siguiente...y luego de servido el almuerzo llegaba el postre criollo, es decir una feta de dulce de membrillo sobre una rodaja de queso o una fruta...
La conversación entre los hombres era tan amena, reían recordando viejas caídas de alguna doma, pero ya Juana empezaba a juntar los platos para dejar todo “reluciente”, pero esta vez María se apresuró y tomando un viejo delantal preparó el piletón con agua caliente y empezó con la faena, cosa que agradó a Raúl y la recompensó con un beso en la mejilla...
María pensó , ¡ por fin, me saldra una bien...! y ahora más tranquila, parecia que pronto aprenderia lo que ellos esperaban de ella..
Terminado el almuerzo, uno a uno los hombres fueron retirandose a dormir la siesta, pues la jornada en el campo empieza ni bien asoman lor primeros rayos de sol y solo aparecen por el rancho para tomar sus alimentos, pues la vida en un campo ganadero es dura...aunque algunos piensen los contrario... la jornada comienza a las cinco de la madrugada, ordeñando, revisando las reses que estan por parir, apartando las afiebradas, vacunando, marcando , señalando, castrando y domando....
 Además de noche se debe mantener cautela por los “cuatreros” que vienen a robar ganado en los lotes más alejados del campo.. Como diria mi abuelita...No todo lo que reluce es oro..!!
                                                                                                                             (continuara)
 

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